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El deporte neuquino, en las puertas de un 2021 complicado y lleno de interrogantes

Centenario tuvo la fecha de marzo, pero no el GP Coronación. ¿Habrá recursos para que vuelva en 2021? (ACTC)

Por Cristian Helou

El 2021 está cada vez más cerca. Será un año de reconstrucción y en ese contexto, el deporte neuquino avizora un panorama complicado. Los clubes la pelean día a día con el objetivo de frenar deserciones y quedar lo mejor parado posible, la competencia interna deberá empezar prácticamente de cero y si de exposición nacional se trata, el futuro está cargado de nubarrones.

Deporte por deporte, el básquet atraviesa una incertidumbre alarmante. Salvo Independiente, que dio algunas señales y podría arriesgarse a jugar la Liga Argentina, y Centenario, que manifestó sus intenciones de seguir en el Torneo Federal, en el resto hay un silencio atroz. El Rojo y la Colonia fueron los únicos que cumplieron con los pagos en tiempo en forma y ahí está la explicación de que, al menos, tengan algo planificado.

Petrolero y Centro Español, los representantes del segundo escalón, lejos de encontrar soluciones, fueron los únicos que no confirmaron su participación en la próxima LA. El país entero sufre con la pandemia, pero está claro que en otras regiones la historia es diferente porque los otros 26 clubes dieron el visto bueno para jugar (o al menos manifestaron su intención) en la 2021.

Pérfora y Pacífico completan el sexteto nacional y en el medio de esa ausencia de datos, el Verde podría hacer el esfuerzo de continuar (tiene asistencia perfecta y es una referencia de la categoría), mientras que el Decano estaría con un pie afuera.

El Rojo sigue como referencia, pero la baja de Rincón del RA es toda una señal. (Diario Río Negro)

En el fútbol, la única competencia a la vista es el Regional Amateur, un torneo que todavía está en la nebulosa, iba a arrancar a fin de mes y todo indica que recién comenzará en 2021. Independiente y Alianza son los créditos de la provincia, pero no hay que perder de vista la baja de Deportivo Rincón, el más ganador de los últimos tiempos.

Al momento de decir no, la ciudad estaba complicada con los casos de Covid19 y si bien es cierto que el presupuesto se podía acomodar, está claro que los tiempos cambiaron y los aportes se redujeron de manera considerable.

Si de vóley se trata, la pandemia se llevó puesto el proyecto de Gigantes del Sur. La Liga Argentina, que ya venía con dificultades, fue la primera en bajar la persiana, aunque sólo faltaban las semifinales y la final, con el Dino en el top 4 después de una década. Sin embargo, la crisis pegó, comenzaron a bajarse los equipos y una, que hizo ruido, le vino como anillo al dedo al team neuquino. Cuando Bolívar dijo basta, le abrió la puerta de salida a Gigantes.

En el anuncio se habló de una rápida vuelta, pero hoy por hoy es un pensamiento demasiado optimista. Todavía están muy lejos de cerrarse los números de la competencia que quedó trunca, a pesar de los buenos resultados de la 19-20, el proyecto venía con demasiados altibajos y así es difícil imaginar un retorno, al menos a corto plazo.

En el mundo de los fierros hay dos eventos que se roban todas las miradas: el TC en Centenario y el Mundial de motocross en Villa la Angostura. La Máxima alcanzó a correr a principios de marzo y hubo fiesta con la victoria Juan Cruz Benvenuti. Y el Mundial primero sufrió una postergación (de marzo a noviembre) y después se suspendió.

El TC tenía previsto el cierre de la temporada para el 20 de diciembre, pero la pandemia modificó todos los planes. En el mundo de versiones y varios autódromos mencionados, en algún momento se habría reflotado la idea hacer el GP Coronación en Centenario. Esta vez, la idea se desactivó rápidamente. No hay recursos y sin esos rápidos pagos que salen por decreto, la ACTC se vio obligada en buscar otras opciones.

Se trata de dos grandes movidas, de las mejores para el ambiente fierrero del país, que van atadas al turismo. Y en estos tiempos, sin movimiento de gente, resulta lógico meter el freno de mano. De cara al 2021, las motos ya incluyeron a la Villa en el calendario, para noviembre; y habrá que ver qué ocurre con el TC.

El Integración es un torneo a potenciar.

Si los pronósticos nacionales no son los mejores, más que nunca habrá que reestructurar la competencia local y zonal. Si Lifune se acomoda y tiene un calendario más atractivo, crecerán las posibilidades de trascender; si el Integración de básquet retoma con el nivel de su última edición, los clubes encontrarán un buen trampolín para dar el salto; si el vóley logra tener una mínima regularidad, será viable una vuelta de Gigantes…

La lista sigue y sí, la facilidad para realizarla choca de frente con una realidad muy complicada. Sin embargo, no queda otra. Después de la pandemia habrá que volver a las bases, potenciar lo de acá, buscar recursos y, principalmente, evitar que el estado sea el máximo accionista.

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