La 6° edición de las 32 Millas La Regata de Limay dejó una marca y promete un crecimiento constante. Más de 200 palistas y 120 embarcaciones coparon el río y a partir de estos números, está el objetivo de que la competencia se instale como una de las más importantes del calendario nacional e internacional y que además lleve el nombre de Regata de Neuquén. La organización fue de la empresa Quatro Vientos y el apoyo del ministerio de Deportes.
Los hermanos Franco y Dardo Balboa marcaron la diferencia, repitieron la victoria del 2019 y establecieron un tiempo de 2h10m41s954/1000. En el caso de Franco sumó la sexta consecutiva ya que desde 2017 viene ganando con diferentes duplas. En K1 ganó Nicolás Salvo; en damas prevaleció la dupla Parra-Otero y en la embarcación individual, María Mare.
Cecilia Komacek, a cargo de la organización, agradeció el apoyo de los diferentes organismos y se mostró entusiasmada con el estatus que fue tomando la prueba. “El objetivo es que Neuquén tenga su regata y la pasión quedó demostrada en el arribo al puente del Paseo de la Costa, con un marco y gran colorido en el recibimiento a los palistas”.
La prueba se desarrolló entre Senillosa y Neuquén, y tuvo tres etapas. “La partida -contó Komacek- fue en la modalidad Le Mans, con todos los botes detenidos a la espera del sonido de la corneta a partir del cual los palistas salen corriendo a buscar su embarcación alineados desde las categorías de elite, algo muy divertido para los espectadores. La llegada fue en China Muerta, en un circuito muy pintoresco en la Laguna Rincón Limay que es un área protegida”.
“Luego de un descanso -siguió- se les ofreció a los palistas un almuerzo en el club Sutiaga. En el intervalo se programó una exhibición de Botes Dragón que practican las mujeres con cáncer de mama y que también estamos desarrollando desde Quatro Vientos”. Allí estuvo la intendenta de Plottier, Gloria Ruíz, quien premió a las tres primeras tres mujeres hasta ese momento.
A partir de las 17 se realizó la prueba contrarreloj “que fue también muy divertida con botes largando cada 30 segundos en el orden invertido que llegaron. Una prueba de mucha adrenalina que le aportó el condimento para que la gente la pudiera disfrutar. En este lugar se hizo el campamento base que permitió a los participantes compartir anécdotas y experiencias”, destacó la coordinadora.
De esta competencia participaron palistas del Valle Medio, de Viedma y Patagones, y representantes de Buenos Aires, Mendoza y de Alto Valle. Atrás de los hermanos Balboa se ubicaron Di Renzo-Fernández y Vázquez-Reyes. Y en K1, Lautaro Labrín y Jeremías Nassivera se ubicaron detrás del ganador Salvo.
