“Estoy con contacto con gente del consulado de Brasil y me dicen que hay viajes en colectivo y en avión a Brasil. Quiero cobrar lo que me deben y volver a San Pablo”. Rodrigo Goncalves, el extranjero que jugó la última Liga Argentina de básquet para Petrolero, sigue acorralado y no puede destrabar su situación.
El pivote está en Plaza Huincul, sin poder moverse desde el inicio de la cuarentena, el 19 de marzo y contó su drama. “No podemos salir de acá sin nuestro dinero, yo suplico que me ayuden. Mi esposa Andrea está embarazada de cinco meses y estamos desesperados por ir a nuestro país”, afirmó.
Rod llegó a la ciudad petrolera en septiembre y apenas cobró dos sueldos. Quedaron pendientes los salarios desde noviembre a marzo (el plazo que arreglaron en forma conjunta la Confederación Argentina, Asociación de Clubes y Asociación de Jugadores).
Comentó además que pudo zafar de la situación porque tenía algunos ahorros, pero la situación no da para más. “Hablo con los dirigentes todo el tiempo y ellos alegan que no tienen el dinero que tienen que pagar de provincia. Busqué por todos lados y envié algunos mails, pero no tuve respuestas”, relató el brasileño.
El problema es que Rod pretende cobrar toda la deuda y hoy por hoy, eso parece imposible. “Salgo de acá con toda mi plata. No puedo irme así. Mi dinero vale. Estamos agradecidos a los dirigentes porque nos han ayudado todo este tiempo, pero necesito cobrar y volver a San Pablo”, cerró.
