Por Carolina Magnalardo
Con 20 jugadoras de la categoría mayores y 36 de la infantil, la escuelita de fútbol femenino Las Flamas, del barrio Islas Malvinas, se consolida como un espacio deportivo en el oeste de la capital neuquina.
Si bien el primer plantel se conformó con jugadoras del barrio, luego se sumaron niñas y mujeres de otros sectores como Almafuerte, Cuenca XV, San Lorenzo, Cordón Colón, Valentina Rural, Alta Barda, Balsa de las Perlas, la Meseta, y en el verano se incorporaron chicas de El Club, de Cinco Saltos.
“El equipo surgió por iniciativa de mis compañeras de trabajo: yo jugaba en Domingo Savio y ellas querían sumarse pero debido al horario no podían concurrir y me incentivaron a que formáramos el grupo y que las ayudara a entrenar. Entonces nos organizamos, hicimos coincidir el entrenamiento con el horario escolar ya que sus hijos estaban en la escuela y aprovechamos esas horas para hacer actividad física”, cuenta Jesica Nievas, jugadora y entrenadora de la escuelita.
En una charla con Aguante Neuquén, detalló que el conjunto nació el 14 de marzo de 2019 y que en septiembre, a pedido de las madres del grupo que querían que sus hijas también jugaran, se armó el equipo infantil. “No contábamos con un lugar para entrenar y entonces usábamos el playón de Ruca Choroi y Batilana. A los vecinos les pareció muy lindo que muchas niñas tuvieran la posibilidad de hacer este hermoso deporte ya que no había, en el barrio, equipos femeninos sino solo mixtos”.
La categoría libre, en enero, compitió en un torneo de beach fútbol organizado por el municipio de Cinco Saltos en el lago Pellegrini. Por su parte, las infantiles solo han jugado amistosos con sus pares de Vencedoras de La Ribera, Cuenca XV, Ceibo. Este año iban a participar de un encuentro de diferentes localidades pero debido a la pandemia se tuvo que suspender.
En el invierno pasado entrenaron dos veces a la semana a las 15 y un día alternativo para las que no podían en los turnos habituales. En verano lo hacían a las 20 para evitar las altas temperaturas. “Gracias a Dios, al comenzar el año nos dieron el espacio para entrenar en el Centro Administrativo Ministerial (CAM) pero costó un poco ponerse de acuerdo con algunos referentes del futbol”, confiesa la DT.
“Nos dieron el espacio para entrenar en el CAM pero costó un poco ponerse de acuerdo con algunos referentes del fútbol”, dijo Jesica Nievas
La crisis sanitaria las obligó a entrenarse de forma individual. “Nos mantenemos comunicadas porque tenemos un grupo de WhatsApp y les mando ejercicios para que entrenen en sus casas pero a veces se complica un poco porque no todas tienen servicio de internet. Con algunas compañeras nos vemos porque como somos revendedoras de productos nos compramos entre nosotras para ayudarnos”, contó.
“Todos los elementos de entrenamiento los conseguimos por esfuerzo propio del equipo y de los padres que siempre están presente”, explica la entrenadora que destaca que la mayoría de las jugadoras se toma con responsabilidad los entrenamientos. “A algunas se les complica un poco más pero valoro el esfuerzo de las que vienen de lejos como Aylén Muñoz, una adolescente de 16 años que es de Valentina Rural”.
Para lo que queda del año proyectan terminar de formar las categorías y participar de torneos provinciales tanto con las adultas como las niñas. Por último, Jesica señaló la urgencia de “comenzar a darle importancia al futbol femenino porque ya hemos sido discriminadas muchas veces”.
