El día que el Nascar llegó a Centenario

El Turismo Nacional dio espectáculo en el autódromo neuquino.

Por Diego Lores

Pasó el Turismo Nacional por Neuquén y el “chapa-chapa” estuvo a la orden del día. La categoría que cautiva por la paridad de sus autos, la gran cantidad de sobrepasos y la abundancia de toques, no defraudó a los que se acercaron al Autódromo Lito Holzman atraídos por el slogan que se le atribuye a la categoría.

En la 3, la clase mayor, la acción se dio de entrada, en la primera curva. Leonel Larrauri embistió de atrás a Julián Santero (que largaba primero) y a partir de allí se generó un incidente propio del Nascar, la popular categoría norteamericana. Al menos diez autos quedaron afuera de la pista, con el campeón Santero sin chances, y con el rionegrino Antonino García sacando provecho de la situación: avanzó del puesto 13 al cuarto lugar.

La “Batalla de Centenario” no terminó ahí. Promediando la carrera, el neuquino Juan Cruz Benvenuti protagonizó un incidente con Leonel Larrauri, que al final de la carrera los comisarios deportivos consideraron como sancionable. Luego, el propio Larrauri (involucrado en casi todos los incidentes hasta su abandono) se enganchó con Sebastián Gómez, produciendo una espectacular elevación de su auto y su posterior despiste, que finalmente dejó al oriundo de Granadero Baigorria fuera de carrera. Tras la prueba, Larrauri fue sancionado por “maniobras peligrosas reiteradas” y con seis puestos en la grilla de la próxima carrera.

El podio de la clase principal en Centenario. Koopmann y Gutiérrez, activos.

La contienda no dio respiro ni siquiera al final. En la última curva, el debutante y prometedor Ignacio Montenegro impactó desde atrás a Benvenuti, quien a la vez embistió al “Carnicero” Gastón Iansa. Montenegro terminó siendo excluido del clasificador final.

Joel Gassmann, que protagonizó un excelente duelo con Alfonso Domenech, finalmente se quedó con la victoria, la segunda en la categoría para él. Atrás quedó el propio Domenech, quien luego de la carrera fue elogiado por el ganador por su caballerosidad a la hora de realizar las maniobras a la par. Toda una singularidad ante tanto revuelo y autos con daños varios.

Tercero quedó Antonino García. El de Luis Beltrán protagonizó un fuerte incidente en la clasificación del sábado, cuando se quedó sin frenos al llegar a la curva dos, terminando con su Ford Focus del Martos Competición por encima de las contenciones de seguridad. Remontó nueve lugares en la serie y diez en la final, llegando por novena vez al podio de la categoría. Más atrás llegaron Martín Chialvo, el Patito Yannantuoni, Sebastián Gómez y el ahora líder del certamen, Carlos Javier Merlo. Jerónimo Teti, que había largado 25°, escaló 17 posiciones y finalizó octavo.

No fue un buen fin de semana para el neuquino Benvenuti. Luego de penar con la hidráulica y el power-shift en la jornada del sábado, finalizó 17° en la final. Hasta la última curva se encontraba en el quinto puesto, pero aquel toque de Montenegro lo dejó prácticamente con las manos vacías. Por su parte, el “Máquina” Montanari terminó 22°, tras largar 37°. José Manuel Urcera tuvo un domingo complicado y abandonó a falta de un par de vueltas.

Juan Cruz Benvenuti no tuvo un buen finde en Cente.

La final de la clase 2 también estuvo muy picante. Martín Blasig y Facundo Bustos protagonizaron un fuerte incidente y terminaron internados en el Policlínico Neuquén. Blasig sufrió la fractura de una vértebra y en las próximas horas se decidirá si debe ser intervenido quirúrgicamente. La victoria quedó en manos de Juan Martín Eluchans. Alejandro Torrisi y Marco Veronesi lo acompañaron en el podio.

Por quinta vez en la historia, el TN pasó por Centenario. La gente se entretuvo con los toques, pero en la categoría ya se debate hasta qué punto el chapa-chapa es válido y cuál es el límite que debe establecerse para evitar incidentes que puedan afectar a los verdaderos protagonistas, los pilotos.

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