Alta Barda, entre el título inolvidable, el cuarteto de selección y los nuevos objetivos

Lucía Monje, una de las integrantes de la selección Argentina.

 

“Cuando ganamos la última fecha de 2018 nos dimos cuenta de que se podía y decidimos ir por todo en el 2019. Cumplimos y ahora queremos seguir en lo más alto”. Marina Baca Cau está muy lejos de bajar la intensidad y tiene el plan concreto de mantener el patín carrera de Alta Barda en lo más alto. Es la cabeza visible de la actividad, pero trabaja junto a otros seis profes y todos dirigen a más de 200 chicos.

La cantidad permite una (buena) competencia interna y ahí aparece la calidad. Y en el club del alto neuquino hay integrantes de selección, tanto en mayores como en las formativas.

Esta histórica conquista en el Nacional de Clubes llega en un buen momento, pero se viene la difícil tarea de sostenerse. “Cuando dimos el golpe en Mar del Plata nos convencimos de que tenía que ser de nosotros. Después repetimos en Vicente López y lo cerramos en Rosario. Nos trajimos todas las copas y es un orgullo. Pero eso nos obliga a seguir por este camino. Vamos por más”, avisó Marina.

Con varios patinadores en los equipos nacionales, uno de los grandes objetivos apunta a los Juegos Olímpicos de la Juventud Dakar 2022 y hay cuatro deportistas de Alta Barda con chances concretas de participar.

Lucía Monje y Joaquín campos, en cuarta; Milagros Calviño y Caetano Martorello, en prejuveniles, flamantes campeones, afrontarán en noviembre un nuevo evaluativo en Mar del Plata y hoy por hoy, están muy bien posicionados para ir a dichos Juegos.

“Ya vienen trabajando, han sido convocados y ahora van a ser observados por gente del Enard. Como campeones nacionales tienen muchas chances de seguir en las selecciones”, afirmó Marina.

“Para mí y para todo el cuerpo técnico es una gran satisfacción, porque son patinadores que tenemos desde chicos. Es como con Francisco (Reyes Petrelli), que lo tuve como diez años en el club”, agregó.

De cara al futuro, la entrenadora apuesta a consolidar el proyecto. “En Neuquén y en la región Alta Barda es lo mejor. Tenemos más de 200 chicos, vienen de Senillosa, Centenario, Cutral Co, Plaza Huincul y hasta de Picún Leufú. Hay que seguir por este camino”, cerró.

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